viernes, 8 de agosto de 2008

Y después...

Y después,
cuando pises descalza
sobre la piel de la tierra,
recuerda
en tus dedos
y en tu planta
y en el talón
de tus pies,
mi fuente
y mi raíz y mis raíces,
con tu humedad
en los atomos del universo
y mi vida
respirando en tu vida.

Luis Alberto Machado
"Canto a la Mujer"
(Venezolano)


martes, 5 de agosto de 2008

Testigo de excepción...



A Maribel y AnaUn mar, un mar es lo que necesito.
Un mar y no otra cosa, no otra cosa.
Lo demás es pequeño, insuficiente, pobre.
Un mar, un mar es lo que necesito.
No una montaña, un río, un cielo.
No. Nada, nada,
únicamente un mar.
Tampoco quiero flores, manos,
ni un corazón que me consuele.
No quiero un corazón
a cambio de otro corazón.
No quiero que me hablen de amor
a cambio del amor.
Yo sólo quiero un mar:
yo sólo necesito un mar.
Un agua de distancia,
un agua que no escape,
un agua misericordiosa
en que lavar mi corazón
y dejarlo a su orilla
para que sea empujado por sus olas,
lamido por su lengua de sal
que cicatriza heridas.
Un mar, un mar del que ser cómplice.
Un mar al que contarle todo.
Un mar, creedme, necesito un mar,
un mar donde llorar a mares
y que nadie lo note.
Francisca Aguirre
(española)

viernes, 1 de agosto de 2008

Tu nombre...

Nace de mí, de mi sombra,
amanece por mi piel,
alba de luz somnolienta.
Paloma brava tu nombre,
tímida sobre mi hombro.

Octavio Paz