Me he quedado sin pulso y sin aliento
separado de ti. Cuando respiro,
el aire se me vuelve en un suspiro
y en polvo el corazón de desaliento.
No es que sienta tu ausencia el sentimiento.
Es que la siente el cuerpo. No te miro.
No te puedo tocar por más que estiro
los brazos como un ciego contra el viento.
Todo estaba detrás de tu figura.
Ausente tú, detrás todo de nada,
borroso yermo en el que desespero.
Ya no tiene paisaje mi amargura.
Prendida de tu ausencia mi mirada,
contra todo me doy, ciego me hiero.
Ángel González
Catatanemak
Hace 3 años.
4 comentarios:
no te hieras...no. tqm
Bonito blog, puedes contar conmigo para lo que sea necesario, perdón por dejar el mensaje debajo de éste hermoso poema pero nuna supe como decirte "Azul", gracias.- besos
No herirse es dificil, Hijita de mi Corazón, lo bueno, cuando todo pasa, es que las cicatrices nos sirven para recordar qué es lo que no debemos hacer ;)
Hola, Walter. Cuento contigo, ya te tengo "fichado" para Más Azules. Gracias por el ofrecimiento y siénte bienvenido cada vez que vengas :)
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