domingo, 5 de mayo de 2013

Pequeña historia de bolsillo...





Luego de tomar el último sorbo de café, 
y con un gesto que yo amaba, 
dió vuelta a la esquina 
entre la gente 
y se metió en mí 
hasta perderse. 

Eduardo Ramos-Trilce



2 comentarios:

Unknown dijo...

encantado de llegar...

Azul... dijo...

Gracias ��