martes, 17 de noviembre de 2009

Entonces...

Entonces el beso conocía el norte y el sur,
el este y el oeste de toda cartografía
como si antes de labio en medio de la lluvia
hubiera sido rosa de los vientos
o brújula del corsario de los siete mares.
Nada estaba preparado
-dormían las leyendas su sueño abisal-
y sin embargo no cabía margen alguno de error:
cada noche atracaba en su alborada,
cada zozobra en su bahía,
cada deseo en su rompeolas.
Así era el amor,
volver a casa
con la red llena de certidumbres

nunca un naufragio en alta muerte
silenciosa
como ahora.

Almudena Guzmán

4 comentarios:

arandanilla dijo...

Indefinible...

Azul... dijo...

Y sí...

arandanilla dijo...

tía, que nos hemos qudao solitas, que nos comentamos mutuamente, onde ta la gente, en feisbu namas???

Azul... dijo...

A este blog entra muchísima gente, pero nadie tiene el detallazo de comentar, salvo tú ♥
Y me entero de que entran por el "chismoso" del contador que tengo en el sidebar, que sino me creía en un planeta deshabitado, excepto por nosotras dos jaja

Gracias por estar siempre, mi muchachita maravillosa ♥♥